Me topo con situaciones, propias o ajenas, en las que estás como loca esperando a que suene el teléfono porque primero muerta que llamar primero, o sola en tu casa comiéndote las uñas de los pies esperando que te inviten aunque sea a dar la vuelta al súper.
No pasa nada cuando se toma el primer paso, cuando eres la primera en llamar, en decir te quiero. Las oportunidades son tan frugales que no debe de existir pretexto alguno para desperdiciarlas. Quizá no salgan bien, pero, ¿lo bailado quién te lo quita?
Hay cosas que nunca sabrás, te lo perdiste por ser "interesante".
No me quiero perder de nada y, aunque a veces sigo peleando con la voz de mi madre, me descubro tomando el primer paso. Eso, para que vean, sí que es interesante...
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